Los mejores ralladores de queso
¿Cuál es el mejor rallador?
Cocinar recetas con acabados naturales y sabrosos es sencillo siempre y cuando emplees alimentos lo más frescos posibles, recién cortados.
¿Piensas que sabe igual una pizza con queso rallado de bolsa que con uno rallado artesanalmente?
La diferencia es contar con un buen rallador e invertir algo más de tiempo en el cocinado al incluir queso recién raspado.
A continuación te cuento cuáles son los mejores ralladores del mercado y qué debes tener en cuenta para sacarles el máximo partido.
Qué encontrarás en esta guía:
- Los 10 mejores ralladores de queso
- Comparativa de los mejores ralladores
- Guía para comprar un rallador para queso
Mejores ralladores de queso del mercado
- Rallador multifuncional RaniacoVer en Amazon
- Molino rallador de Queso LeifheitVer en Amazon
- Rallador y Zester HoudianVer en Amazon
- Rallador Cuatro Caras LacorVer en Amazon
- Rallador giratorio WestmarkVer en Amazon
- Rallador de 6 caras KICHLYVer en Amazon
- Rallador de Queso con cubiertaVer en Amazon
- Rallador de Queso ZylissVer en Amazon
- Rallador de Queso Rotativo GeedelVer en Amazon
- Rallador Gourmet WMFVer en Amazon
- Cubierta de plástico ABS
- Material: acero inoxidable
- Funcionamiento: manual
- Disponible en negro, naranja y rosa
Se trata de un utensilio con el que rallarás desde quesos duros a cáscaras de frutas. Conseguirás virutas finas que resulten óptimas para un cocinado suave.
A causa de su tope de silicona inferior, aunque lo emplees de forma vertical no habrá riesgos de que se resbale y te pueda dañar con las cuchillas.
- Tope de silicona inferior – reduce los resbalones
- Incluye cubierta protectora
- Un único diámetro de corte
- Funcionamiento: rotatorio manual
- Material: acero inoxidable
¿Necesitas un rallador para queso que sea rápido y versátil? Con este utensilio que funciona mediante una manivela lograrás rallar el queso en un instante sin apenas esfuerzo.
Tiene un sistema eficaz que junto con las cuchillas de acero, al introducir cualquier queso en su tambor lo tritura con facilidad. Consigue rallar incluso las variedades más consistentes de queso, como el pecorino, el grana padano o el parmesano.
- Manivela ergonómica
- Exterior de plástico – más seguro
- Desmontable – limpieza más sencilla
- Resulta un poco endeble
- Material: acero inoxidable certificado
- Revestimiento de silicona
- Funcionamiento: manual
Este producto viene con una funda transparente de plástico duro para que cuando termines de usarlo, puedas guardarlo de nuevo sin riesgo a cortes.
Sus finas hojas de acero permiten rallar de forma muy fina, consiguiendo crear hilos de quesos, huevos u hortalizas que no sean demasiado duras.
- Mango ergonómico
- Apto para el lavavajillas – facilidad de limpieza
- No es apto para vegetales
- Disponible con 4 o 6 caras
- Material: acero inoxidable
- Funcionamiento: manual
¿Recuerdas el rallador que tenía tu madre en su casa? Este es como el modelo tradicional, pero está creado con acero inoxidable de alta calidad con el fin de que sea lo más duradero posible.
Incluye un asa superior para que lo sostengas mientras raspas los alimentos. El lateral con las aberturas más pequeñas es perfecto para rallar la cáscara de frutas como la naranja o el limón.
- Apto para lavavajillas
- 4 caras de rallado – más completo
- No tiene topes de silicona
- Funcionamiento: giratorio manual
- Material: acero inoxidable
- 3 cabezales
Con este producto, que incluye 3 tambores de corte, te va a ser más sencillo picar y cortar cualquier tipo de alimento duro, como quesos, hortalizas… Incluso ralla las zanahorias, que tienen una consistencia muy dura.
Cuando hayas terminado de emplearlo, tan solo vas a tener que meter los cabezales en el lavavajillas y estarán limpios para su próximo uso.
- Revestimiento de plástico – más seguro
- Apto para lavavajillas
- Parece endeble
- Material: acero inoxidable de grado 430
- 6 caras de rallado
- Funcionamiento: manual
Se trata de un rallador de grandes dimensiones, por lo que su uso resulta más sencillo y además reduce el riesgo a cortes.
Al tener 6 caras, rallarás queso, hortalizas, frutas o casi cualquier tipo de alimento con las dimensiones que quieras.
- Mango superior de caucho – ergonómico
- Tamaño grande – 24 cm
- No incluye protector
- Material: acero inoxidable 304
- Único diámetro de ralladura
- Funcionamiento: manual
¿Necesitas virutas muy finas? Las cuchillas de esta herramienta son de un tamaño pequeño, permitiendo que la uses para rallar frutos secos o conseguir finas hebras de queso.
Los laterales del acero tienen una cubierta protectora que dificulta los cortes. Aunque pases la mano es complicado que te dañe.
- Cubierta protectora de PE – más segura ante cortes
- Se puede colgar – facilidad de almacenamiento
- No incluye cubierta protectora
- Material: acero inoxidable
- Funcionamiento: rotatorio manual
Este raspador está recubierto en su exterior de plástico, por lo que además de ser ergonómico, te asegura que no vas a entrar en contacto con las cuchillas, evitando que te cortes.
Puedes cambiar el agarre dependiendo de si eres zurdo o diestro, facilitándote que lo emplees a causa de su versatilidad.
Su diseño manual rotatorio permite su uso directamente sobre el plato sin tener que manchar otros utensilios.
- Rallador de manivela – más cómodo
- Incluye varios cabezales
- No desmontable
- Disponible en verde y blanco
- Material: cero inoxidable
- Funcionamiento: manivela rotatoria
Conseguirás laminar verduras para hacer una parrillada, rallar queso para fundir o hacer fideos de hortalizas, porque incluye cabezales de diferentes diámetros a los que dar muchos usos.
Al tener una base, resulta más práctico a la hora de emplearlo. Introduces el alimento y tan solo te tienes que ocupar de darle a la manivela.
- Con base estable – facilita su uso
- Desmontable
- Apto para lavavajillas
- No incluye revestimientos de silicona – menos ergonómico
- Material: acero inoxidable pulido
- Funcionamiento: manivela
Se trata de un rallador óptimo para emplear con quesos, puesto que su diseño firme es útil para que lo uses con quesos blandos así como con otros más duros, como el parmesano.
Cuando termines de emplearlo, lo puedes desmontar para limpiarlo con facilidad . Lo puedes lavar bien de forma tradicional o en el lavavajillas, porque no se dañará.
- Se desmonta facilmente
- Mando ergonómico
- Para todo tipo de quesos
- Precio elevado
Comparativa de los mejores ralladores de queso
PROS
- Tope de silicona inferior
- Incluye cubierta protectora
CONTRAS
- Un único diámetro de…
PROS
- Manivela ergonómica
- Exterior de plástico
- Desmontable
CONTRAS
- Resulta un poco endeble
PROS
- Mango ergonómico
- Apto para el lavavajillas
CONTRAS
- No es apto para…
PROS
- Mango superior de caucho
- Tamaño grande
CONTRAS
- No incluye protector
PROS
- Cubierta protectora de PE
- Se puede colgar
CONTRAS
- No incluye cubierta protectora
Guía para comprar un rallador de queso
A continuación te voy a indicar todo cuanto debes saber para que te conviertas en un experto de los ralladores de queso. Aprenderás aspectos que debes tener en cuenta a la hora de escoger uno y del mismo modo, vas a resolver tus dudas sobre esta herramienta.
¿Qué es un rallador para queso?
Un rallador es un utensilio de cocina que incluye cuchillas de diferentes tamaños, las cuales permiten rallar alimentos sólidos de manera sencilla.
Aunque a día de hoy es una herramienta doméstica bastante tradicional, su origen se remonta al siglo XVI. En este momento histórico, hubo una gran producción de lácteos los cuales no se consumieron, dando lugar a que muchos quesos se endureciesen.
En el año 1540, el francés François Bouller inventó el rallador con el fin de demostrar que aquellos quesos endurecidos sí se podían consumir, aunque de una forma diferente. Su uso disminuyó durante un par de siglos, sin embargo en el XIX se volvió a popularizar hasta nuestros días.
Los avances tecnológicos permitieron que se creasen raspadores eléctricos, los cuales se pueden emplear no solo para el queso, sino también para desmenuzar otros alimentos de consistencia dura.
¿Cómo funciona un rallador?
Los ralladores de queso funcionan gracias a las cuchillas que traen incluidas en el material de acero inoxidable. Al pasar los alimentos sobre estas, conseguirás rallarlos consiguiendo un tamaño u otro de la viruta. Para que les puedas sacar más partido, tienes que saber cómo emplearlo.
Si empleas un rallador manual de una cara, lo mejor es que lo uses sobre un recipiente contenedor colocándolo de manera horizontal. Esta es la mejor manera de usarlo porque al mismo tiempo es la más segura, ya que evitarás que pueda resbalarte dando lugar a cortes.
Por otra parte, los raspadores manuales pero que son de cuatro caras resultan más estables, porque tienen un asa superior sobre la que te puedes apoyar. Asimismo, al tener forma rectangular vertical se reduce el riesgo a movimientos indeseados.
En ambos casos, al raspar el alimentos de forma repetida se obtienen los finos fragmentos, que caerán sobre el recipiente contenedor que pongas debajo.
Los ralladores eléctricos, que funcionan mediante un sistema giratorio, facilitan que al incluir el cabezal con la cuchilla seleccionada y accionar el sistema, el queso se ralle rápidamente.
¿Por qué comprar un raspador de queso?
Contar con un rallador te permitirá que tus platos consigan unos sabores más auténticos y frescos. Por supuesto, puedes incluir en tus recetas queso rallado de venta en comercios de alimentación, sin embargo la calidad es inferior.
Del mismo modo, te va a ser muy útil para recetas de repostería, pudiendo rallar la cáscara de diferentes frutas, como la naranja o el limón, dos alimentos que es realmente complicado encontrar a la venta ya rallados en supermercados.
Tipos de ralladores
Hay varios tipos de ralladores disponibles en el mercado, y tienes que conocer sus características principales con el fin de escoger el modelo que más se ajuste a tus necesidades:
Rallador de una cara
Como norma general, son los más frecuentes y económicos, ideales para uso doméstico. Estos son de uso manual y para emplearlos tan solo vas a tener que colocarlos sobre otro tipo de recipiente que recoja el queso o alimento rallado.
Suelen incluir un tope de plástico para que no resbale, en el caso de que se emplee de manera vertical.
Rallador de varias caras
Es un rallador 4 en 1 o incluso 6 en 1. Incluye diferentes diámetros de corte por sus cuchillas para que se pueda rallar un alimento dependiendo del uso culinario que se le vaya a dar, resultando más o menos desmenuzado. Son una buena opción si se buscan virutas más anchas, como de parmesano por ejemplo.
Tienen forma de torre, por lo que es sencillo emplearlos apoyándolos sobre un plato. El rallador de 4 caras Lacor es una buena opción.
Rallador giratorio
Este funciona de forma más automática que los dos anteriores. Tan solo tienes que incluir el fragmento de queso o de verdura que necesites rallar en su interior y girar la manivela. Un ejemplo de este tipo es el rallador de Queso Rotativo Geedel con manivela rotatoria.
Es manual del mismo modo, no obstante funciona de manera mucho más rápida. Resulta una opción óptima para tener en establecimientos de hostelería.
Consejos para comprar un rallador de queso
Un raspador de queso es un utensilio bastante básico, sin embargo lo mejor es que tengas presentes ciertas características para comprar el que se adapte de mejor manera a tus necesidades:
- Seguridad: hay que tener presente que estos utensilios están formados por cuchillas, por ello es importante elegir uno lo más seguro posible con el fin de evitar daños o cortes. Fíjate en el mango, porque tiene que ser cómodo así como ergonómico para que lo sujetes con propiedad y por ende, no resbale. En el caso de los ralladores de una cara, deben tener un tope de silicona o plástico en la parte inferior, que permita que al emplearlo verticalmente, se mantenga estable. Por otra parte la seguridad también parte del material del que esté formado, como te indico a continuación.
- Materiales: los ralladores tradicionales se fabricaban en estaño, un material noble, sin embargo lo mejor es que escojas uno de acero inoxidable. Este material además de no envejecer ni estropearse al contacto con líquidos, resulta más apto para que lo puedas usar en usos culinarios de manera saludable. No retiene partículas alimentarias ni supone un riesgo para la salud por estropearse el material. Si bien es cierto que también existen los ralladores fabricados en plástico, son una opción más engorrosa y que no funciona igual de bien.
- Usos: ten presente el uso real que le vas a dar. Para usos domésticos un rallador de una cara o de cuatro caras es útil, no obstante en ámbitos de hostelería lo mejor es uno eléctrico o con manivela, porque funciona con mayor velocidad.
Mejores marcas de ralladores
- Leifheit: es una compañía pionera en Europa desde hace 60 años en la producción de artículos para el hogar. Su lema es «Siempre una idea mejor», que es lo que les impulsa a crear y diseñar utensilios que le faciliten el día a día a sus clientes y que tengan un acabado estético potente. Su modelo de rallador molino es el más vendido.
- Lacor: centrados en la producción de menaje y electrodomésticos especiales para hostelería, esta empresa española no ha parado de crecer en casi 70 años de trayectoria. Desarrollan herramientas tanto para uso doméstico como para alta cocina, lo cual confiere fiabilidad a sus productos.
- Westmark: esta es una empresa alemana que tiene su origen en el año 1956. Hubert Deimel funda la compañía con un nombre diferente al actual y desde ese momento la empresa ha ido creciendo paulatinamente e incluyendo más productos de uso culinario en su catálogo, contando en el presente con más de 2 500. Sus ralladores giratorios para queso, así como sus otros utensilios son de calidad, ya que se centran en producir herramientas a precio de mercado y de alta durabilidad.
Preguntas frecuentes sobre raspadores de queso
¿Cómo lavarlo?
Debes limpiar el interior y exterior de tu rallador después de cada uso y cuando cambies de alimento. Para ello no emplees un estropajo tradicional de cocina, porque lo estropearás. La mejor manera es que escojas un cepillo de dientes viejo.
En primer lugar pásale agua para intentar retirar la mayor parte de los restos adheridos. A continuación, usa el cepillo de dientes para retirar los restos de queso que se hayan quedado atascados, tanto de las caras exteriores como interiores.
Si tienes un rallador de cuatro caras, en aquellas caras con cuchillas grandes podrás pasar el estropajo siempre en la dirección que no corte.
La mayoría de estos utensilios pueden ser lavados asimismo metiéndolos en el lavavajillas, ya que su material inoxidable no se estropea.
Déjalo secar y estará listo para cuando quieras volver a emplearlo.
¿Puedo rallar queso y congelarlo?
La respuesta es sí, sin embargo no es algo recomendable si quieres que el queso mantenga su calidad. Al emplear queso rallado congelado, lo más frecuente es que una vez descongelado pierda por completo su consistencia.
Lo ideal es que tengas una cuña de queso en la nevera y lo ralles en el momento de uso. Es algo que apenas te va a ocupar tiempo y que resulta la mejor opción para que tus platos consigan un sabor auténtico.
¿Puedo rallar otros alimentos?
Los ralladores de queso, especialmente aquellos que son de cuatro caras, son aptos para poder rallar otros alimentos. El uso alternativo más empleado es con cáscara limón, puesto que es un alimento muy usado en la repostería para conferir sabores cítricos.
Análisis de otros utensilios de cocina: